Si eres de los que vive preocupado por contar las calorías de lo que comes para bajar de peso o simplemente por mantenerte, ¡este artículo es para ti!
Debemos entender que, si tenemos de frente dos alimentos con la misma cantidad de calorías, estas pudieran generar una respuesta distinta en tu cuerpo a nivel hormonal; por ejemplo, 100 kcal en frutos secos (como las nueces) no tienen la misma respuesta que 100kcal de pan.
Es decir, la ingesta de pan o torta de chocolate, por ejemplo, incrementará aún más los niveles de glicemia y, por ende, la insulina en sangre, cosa que pasaría de manera distinta al comer frutos secos o alguna proteína.
Por otro lado, el organismo tarda mucho más tiempo digiriendo un macronutriente como la proteína, que un carbohidrato solo, lo que tiene como consecuencia que, al digerirse más rápido, así mismo se absorbe más rápido y nos vuelve a dar hambre más rápido.
Cuando tu dieta está acorde en las calorías, pero es rica en alimentos de baja calidad, muy baja en nutrientes, alta en grasas trans, hará que tu pérdida de peso se frene o irá desmejorando poco a poco tu salud.
Esto se debe a los altos niveles de insulina que puede causar inflamación, acumulación de grasa y, a largo plazo, una resistencia a la insulina y hasta puede convertirse en algo más crónico como la diabetes tipo 2.
Seguro has escuchado que “mientras quemes más calorías de las que consumes, perderás de peso” y sí, efectivamente será así, siempre y cuando lleves una dieta de calidad nutricional, ya que lo más importante no solo es el número de calorías, sino los nutrientes, se trata de comer estratégicamente y para toda la vida.